En Turín del 10 al 26 de febrero de 2006 se celebraron los XX Juegos Olímpicos de Invierno. En ese momento, Italia se convirtió en la amante de los Juegos Olímpicos por segunda vez: por primera vez, los Juegos se celebraron en este país en 1956.
1627 atletas y 1006 atletas de 80 países participaron en los Juegos Olímpicos de Turín, y el equipo estadounidense, que incluyó a 211 personas, fue el más grande. Como parte del evento, se realizaron competiciones en 15 deportes: bobsleigh, esquí de fondo, biatlón, curling, patinaje artístico, hockey, snowboard, esqueleto, esquí, trineo y patinaje de velocidad, esquí de estilo libre, biatlón, pista corta y salto de esquí. Se ganaron un total de 84 juegos de medallas.
Los Juegos Olímpicos de Invierno en Turín fueron inaugurados por el presidente italiano Carlo Azelio Champi. Durante la ceremonia, el juramento olímpico en nombre de todos los jueces fue realizado por Fabio Bianchetti, y en nombre de todos los atletas, por Giorgio Rocca. La llama olímpica fue encendida solemnemente por Stephanie Belmondo. Los atletas participantes se encuentran en las aldeas olímpicas de Turín, Sestriere y Bardonecchia.
El mayor número de premios según los resultados de los Juegos Olímpicos se otorgaron a atletas de Alemania. Ganaron 29 medallas, incluidas 11 de oro, 12 de plata y 6 de bronce. Los alemanes demostraron ser los mejores en biatlón: de 30 medallas jugadas, pudieron ganar 11, y de 10 carreras, fueron derrotados en solo una. En las competiciones de trineo, los atletas de Alemania ganaron las tres medallas de oro.
Estados Unidos ocupó el segundo lugar en el número de premios, habiendo recibido 9 medallas de oro y plata y 7 medallas de bronce, además, los atletas se desempeñaron mejor en competencias de curling femenino, en patinaje de velocidad en distancias de 500, 1000 y 5000 metros y en snowboard. Los rusos tomaron el cuarto lugar, recibiendo 8 medallas de oro, 6 de plata y 8 de bronce. Los primeros lugares fueron para atletas rusos en competencias de patinaje artístico, patinaje de velocidad, esquí y biatlón.
La ceremonia de clausura incluyó un discurso de Valentino Castellani, Presidente del Comité Organizador de los XX Juegos Olímpicos, así como un discurso del cantante Avril Lavigne. La solemnidad de la situación se echó a perder cuando el español corrió al escenario e intentó quitarle el micrófono a Castellani. Por supuesto, fue detenido por funcionarios de seguridad, pero este ridículo incidente fue recordado por atletas e invitados.